3 ene 2015

No hay tal crisis, una dice no hay tal crisis mientras tira un par de platos al piso, una dice no hay tal crisis y se ríe con su mejor cara de bólida, una dice no hay tal crisis y saca un turno en la peluquería, no hay tal crisis y te pones kilos de tapa ojeras, una dice no hay tal crisis y rompe lo que tiene a mano. Una pone su mejor cara de bolida y dice no hay tal crisis, pero tarde o temprano llega el día en donde la crisis tiene el tamaño de una estría y ahí hay que aceptarla. Se puede negar la crisis un día, un mes, un año pero llega ese día en que la crisis te explota en la cara. Llega la crisis uno cree que es el final que se termina todo, pero en realidad ahí empieza todo, atravesar una crisis es como pasar por un buena cirujano plástico, sos la misma pero distinta, dan miedo las crisis.
Las crisis son como los años te sorprenden y no te queda otra hay que enfrentarlos y llevarlos. La crisis es un viaje de ida, pero también puede ser un viaje de vuelta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario